HALO INFINITE

¿DE QUÉ SE TRATA?

Después de la batalla en la que la nave Infinity fue invadida, un piloto queda varado en el espacio. Esperando ayuda pasa 6 meses dentro de su Pelican hasta que se topa con el Jefe Maestro flotando en el espacio. Al ayudarlo, el Jefe recuerda que aún tiene trabajo que hacer y que para ello necesita la ayuda de The Weapon (El Arma), una réplica de Cortana, la inteligencia artificial que ha estado apoyándolo por años. Juntos, el piloto y John-117, descienden a Zeta Halo, otra de las ya conocidas instalaciones Forerunner y así comienza esta nueva aventura.

¿CÓMO SE JUEGA?

Pues sí, el Jefe Maestro está de regreso en un Halo que es mucho más grande y ambicioso que cualquier otro. Y nos referimos por supuesto tanto al juego mismo como al mundo que le tocará explorar. Para empezar ahora sí estamos en control del Jefe Maestro desde el inicio y durante todo el juego, pero ahora ha ganado algunas habilidades nuevas que cambian la dinámica del combate. El juego sigue siendo por supuesto un juego de disparos en primera persona, y algunas de las armas que ya conocemos de otras entregas de la serie están de regreso como el rifle de asalto MA40, el rifle de batalla BR75 o la infalible espada de energía.
Irás conociendo nuevas armas en el camino, como el Rayo Térmico, el Carbonizador o el Skewer. Pero sin duda el artilugio del que todos hablan y la “gran novedad” en el juego es el gancho retráctil que tiene básicamente dos funciones, atraer o acercarnos a objetos. Este accesorio no se agota, está disponible desde el inicio y es muy importante usarlo de manera constante por la verticalidad que ahora tienen los escenarios pues resulta que en este nuevo Halo el mundo es abierto y puedes ir a donde quieras, por lo que este gancho es muy útil para explorar nuevas zonas y alcanzar otras. Más de una vez te va a salvar de muchas y muy variadas formas.


Regresando al combate ahora contamos con una gran cantidad de bobinas esparcidas por todo el mundo anillo. Por bobinas entiéndase contenedores con diferentes tipos de plasmas que funcionan como una especie de granadas o explosivos. Hay unos que explotan, otros que electrocutan, otros que estallan disparando una especie de metralla de plasma… en fin. Sus efectos son variados, pero utilizarlas es importante porque la munición para las armas no abunda y estos contenedores terminan ayudándote a despejar las zonas de enemigos.


Pero… ¿qué tan abierto es este nuevo mundo? Pues la libertad de ir en cualquier dirección existe, pero eso no quiere decir que el juego no tenga un orden. Como cualquier otro Halo, en este hay objetivos específicos necesarios para poder avanzar, pero esparcidos por todo el mundo están varias zonas que podrás liberar de los enemigos para sumarlas como bases de la UNSC. No es obligatorio hacerlo, pero esto facilita el avanza al ofrecerte varias “paradas” en las que podrás recargar munición, cambiar de armas, solicitar aliados o pedir vehículos. Además, esparcidas por todo el mapa hay una gran cantidad de objetos que vale la pena conseguir porque algunos de ellos otorgan premios para el modo multijuagdor, pero otros te permitirán ir creciendo las habilidades del Jefe Maestro. Estos “núcleos Spartan” mejoran algunas habilidades como el tiempo de recarga del gancho o el daño que puede hacerle a los enemigos con el mismo. Los núcleos también mejoran los escudos del Jefe para que tengan más durabilidad y menos tiempo de recarga. O incluso puedes invertirlos en la mejora que te permite rastrear enemigos en coberturas mayores. Y solo estamos mencionando algunos. Esto termina “obligándote” a buscar por todo el mapa estas mejoras por lo que lo que en teoría no era “a fuerzas”, al final lo es (a menos que te quieras aventar todo a la “viva México” y esperar lo mejor de tus habilidades básicas).
En el sentido técnico la campaña luce increíble, con un estilo gráfico que recuerda mucho a las primeras aventuras del Jefe Maestro sin dejar de aprovechar y sacar todo el beneficio de las consolas de nueva generación. Toda la ambientación, personajes, objetos, vehículos y efectos visuales son sorprendentes considerando el universo de Halo y la estética visual que siempre ha manejado la serie, pero alcanzando nuevos niveles en detalles y desempeño.
En definitiva, la campaña va a ser del agrado de los jugadores que estaban esperando más aventuras, acción e historia con el Jefe Maestro. Tienen nuestra palabra de que no va a decepcionarlos.

Halo Infinite abrió su modo multijugador antes de que la campaña arribara. Esto permitió probar los combates de manera anticipada a todos los usuarios de Xbox Game Pass Ultimate, constatando la buena programación que 343 Industries había logrado en esta modalidad. Aunque los modos y los mapas disponibles no son tan diversos o numerosos como en otros juegos, la variedad es suficiente para pasarla muy bien en todos los enfrentamientos. Cada batalla, perdida o ganada, otorga puntos de experiencia que se van canjeando en automático en el pase de batalla gratuito, aunque como en muchos otros juegos también se ofrece uno de paga que mejora los premios obtenidos. Eso sí, todo es cosmético y no se ofrece nada que ponga en ventaja a un jugador sobre otro. Aplaudimos esta decisión. Pero ojo, que eso no quiere decir que no haya microtransacciones porque sí las hay. Estos pagos que se hacen mediante la compra de monedas del juego con dinero real, sí pueden ofrecer algunos puntos de experiencia adicionales para que subas el nivel y alcances los premios de cada pase de batalla, pero tampoco ofrecen nada que te ponga en ventaja sobre otros jugadores y de nuevo aplaudimos eso. Ahora, eso no quiere decir que no haya quejas, sobre todo se han dado en los precios de los paquetes de monedas del juego, cuyos valores, como en muchos otros títulos, siempre dejará monedas “sobrantes” para incitarte a seguir “invirtiendo” en el juego. Ya veremos cómo continúa la comunidad reaccionando a estos “cambios” y qué hará el desarrollador frente a las opiniones negativas.

Halo Infinite es sin duda una nueva entrega digna del peso del nombre de la serie. Es una especie de reboot espiritual que sin duda va a dejar contentos a los jugadores, por lo menos mucho más de lo que lo hizo Halo 5 Guardians y Halo 4. La campaña y el multijugador se sienten como dos oportunidades diferentes pero complementarias y ofrece a los jugadores la variedad que buscan sin cansarlos pronto.

LO BUENO

  • Ahora sí, el Jefe Maestro está de regreso
  • Nuevas mecánicas de juego y habilidades
  • Mundo abierto con un gran apartado técnico

LO MALO

  • No llegó con el modo de campaña cooperativo que tanto nos gusta
  • Los niveles de temporada y la experiencia en el multijugador suben muy, muy lento
  • Precios de la moneda de juego altos y paquetes injustos
¿ES NECESARIO HABER JUGADO LOS HALO PREVIOS?
No necesariamente. El contexto de la serie es uno, del primer al tercer juego, y otro del cuarto a este. Se supone que la saga del Reclamador se extendería por más entregas, pero esto cambió debido a la retroalimentación de los jugadores con respecto a los anteriores títulos. Halo Infinite como juego de disparos en primera persona se disfruta sin conocer del todo la historia, pero no está de más jugar los anteriores para conocer la evolución de la serie y sobre todo porque siempre han sido muy divertidos.